El día después de Reyes amaneció un día lluvioso. Estuvo toda la mañana lloviendo incesantemente y por la tarde empezó a nevar. Tampoco paraba... así que por la noche la calle, desde mi ventana, tenía este aspecto.
Mi pequeño jardín oriental, en el balcón, con la imagen de Buda, sereno, impertubable, cubierto de nieve...
El 6 de enero abrieron, después de un mes, el Parque... mucho me temo que vienen tiempos de clausura (otra vez me quedo sin pasear entre los pinos :-( Al menos espero que haya terminado la tala y poda de ramas.
2 comentarios:
Qué bonitas fotos ... :)
Un abrazo y cuídate.
Gracias, Nora. El frío se está empezando a notar, pero todo es cuestión de abrigarse bien.
Un beso.
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