Dádiva
por Czeslaw Milosz
Un día muy feliz.
La niebla se levantó pronto, trabajé en el jardín.
Los colibrís se demoraban sobre las madreselvas.
No había cosa en la tierra que yo deseara poseer.
Sabía que no merecía la pena que envidiase a nadie.
Cualquier mal que hubiera sufrido, lo olvidé.
Pensar que una vez fui el mismo hombre no me molestaba.
En el cuerpo no sentía dolor.
Cuando me estiré, vi el mar azul y velas.
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Este poema es un regalo de Antonio dentro de un libro precioso, hace unos cuantos cumpleaños. Es un poema sencillo y hermoso. Contagia esa sensación de limpieza y me hace sentir mejor; es un poema curativo como pocos.
Lo he vuelto a encontrar en la red, buscando información sobre Raymond Carver; aparece en su último libro de poemas (Un sendero nuevo a la cascada. Últimos poemas, introducción de Tess Gallagher, traducción de Mariano Antolín Rato, Madrid, Visor, 2001, 2ª ed., p. 23).
Y al leerlo he vuelto a sonreir, como lo hice la primera vez que lo leí. Pienso en ese día tranquilo, un lugar cerca del mar y la sensación de plenitud, de total felicidad; aquí está básicamente lo que yo deseo, mi sueño y mi esperanza. Espero que llegue algún día igual al que se describe en el poema. Y que se repita siempre, al menos en su esencia.
Gracias, Antonio. Te lo devuelvo, ahora que estás recuperándote de tu esguince.
Resaca de elecciones y vuelta otra vez a la normalidad. Marzo en su segunda semana, un día gris de invierno, no demasiado frío. He visto el sol amanecer entre nubes plateadas.
Feliz lunes.
4 comentarios:
Gracias, Toñi.
También hacía tiempo que no leía yo este poema, que te deja tan en paz con la vida y te recuerda que hemos de disfrutar de los pequeños lujos que tenemos diariamente.
La foto es tan bonita que parece irreal. Resulta difícil creer que haya lugares tan perfectos.
Un beso
Gracias, Antonio. La foto es de verdad muy bonita, pero más el poema.
Otro beso.
Que sensacion de plenitud se tiene que sentir si se puede recitar ese precioso poema de forma personal.
"No habia nada que quisiera poseer" ¿se puede tener mas?
Algun dia espero sentarme en mi terraza y mirando a mi corto horizonte decir palabras parecidas.
Sí, es de una riqueza impresionante y también es mi deseo más íntimo llegar a ese punto.
Por cierto, este sábado me llamaron de la librería, que ya tenían el de Carver: "Todos nosotros". Me ha venido muy bien tenerlo, ha sido como un regalo de cumpleaños. He estado leyéndolo todo el fin de semana, saboreándolo. La edición que tengo me encanta, porque vienen los poemas en inglés, como si fueran notas a pie de página, y así he podido comprobar que la traducción es buena y bastante fiel al original.
Es curioso, ayer, en el día de mi cumpleaños, tuve un estado muy parecido a este poema. Sin proponerme nada estuve tranquila, conforme, no sentí dolor (ni físico ni del corazón). Me sentí libre, al no tener expectativas ni imaginarme lo que debía suceder o ser perfecto y así tuve más de lo que esperaba: llamadas de amigos que me felicitaban y me enviaban cariño, un día de sol y cielo azul y la sensación de que todo estaba en su lugar.
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