Los niños que participaron cursan 3º y 5º de Primaria en el colegio Severo Ochoa. Sin saber qué era un haiku y recibiendo unas indicaciones básicas y, sobre todo, tomando contacto con los mejores libros de haiku, consiguieron escribir haiku en menos de una hora. Frutos Soriano, presidente de AGHA, dedicó la mayor parte del tiempo a corregir y asesorar a los niños.
Todo lo necesario para el taller: libros de haiku, lápices, papel ... y ganas de ponerse a ello.
Y vaya si se pusieron ... algunos consiguieron captar el instante o, al menos, pusieron su mayor empeño. Me sorprendieron gratamente los niños: receptivos, aplicados y llenos de entusiasmo. Espero que les haya quedado al menos un buen recuerdo de esa mañana.
Tras el taller, Frutos y este diente de león.
Y por la tarde, Frutos y Juan Carlos junto a Rafael y Pepe, con quienes mantuvimos una amena conversación sobre haiku. Durante esta jornada se regaló el libro de Bidó: "Huellas de unicornio"
2 comentarios:
Me hubiera encantado ir Toñi, pero esto de ser trimadre es superlioso, un beso y sigue así :)
Un taller bien chulo. Yo estuve allí por la mañana y quedé
sorprendida por la energía y la curiosidad que tienen los niños para aprender... Y qué laboriosidad... jaja, algunos necesitaban varios folios.
Felicidades a los maestros, por enseñar lo que saben con paciencia, entusiasmo y siempre con una sonrisa.
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